Oro blanco

Terminaron los Juegos. Han sido bonitos: Bekele, Phelps, Bolt, Cid, Nadal... Muchos nombres y "triunfadores de las Olimpiadas", como les gusta decir a los periodistas.

Me apetece recordar hoy a un puñado. En primer lugar a los capitanes de los equipos españoles de balonmano y baloncesto, Barrufet y Jiménez. Han sido un ejemplo para el deporte, para España y para el mundo del olimpismo al completo. Algunos hemos crecido aprendiendo y conociendo el deporte con ellos, y nos va a costar entenderlo sin ellos;, sin más "ha parado David Barrufet", sin más rebotes silenciosos acumulándose en las zarpas de Carlos Jiménez.

En segundo lugar, a Joan Llaneras, el mejor medallista español de la Historia olímpica. Emociona ver su cara mirando al cielo y saludando a su ex-compañero Gálvez, fallecido en una carrera. ES la clase de campeón silencioso que a mi particularmente me parece imprescindible.

Y por último, a la selección de baloncesto. A un equipo que nos ha emocionado a mucha gente que conocíamos este deporte de oídas, para luego engancharnos e implicarnos. Hoy perdieron contra los americanos, un grupo de gente que sabe saltar y jugar al baloncesto muy bien (por eso tienen el oro, por eso y por los pasos), pero que no son ni la mitad de campeones que los nuestros. Los de Aíto, la selección española, han mostrado al mundo ser como una familia, donde por separado tienen límites pero juntos los superan, llevando el nombre de España, de paso, a las más brillantes páginas de los J.J.O.O.

Rudy no es Wade, Jiménez no es Lebron, Felipe no es Bryant. Pero juntos son un equipo que ha rendido a sus pies a un pais como China, cegada por sus propios éxitos y chanchullos para todo lo demás. Los ánimos en la final del público local son la clara prueba de que aunque Boozer tenga un oro que a Calderón le falta, no es el auténtico campeón. Un oro de pandilleros arrogantes/ cracks del baloncesto NUNCA será más que el orgullo que sentimos los que nos consideramos amantes del deporte hacia Pau y sus chicos. El olimpismo dictó sentencia a favor de España, y eso, Kobe Bryant, es algo que no podrás acallar por muchos triples que metas y por mucha chulería que exhibas. Tú tienes un trozo de oro, merecidamente ganado. Nosotros tenemos una plata que sabe a gloria, a Juegos Olímpicos, a lágrimas de emoción. Yo en la selección española he visto DEPORTE (así, en mayúsculas y bien grande). Nuestra medalla es de oro blanco.